martes, 23 de agosto de 2011

Poema 20



Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: " La noche está estrellada, 
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche. 
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos. 
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería. 
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche. 
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella. 
Y el verso cae al alma como pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla. 
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos. 
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca. 
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles. 
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise. 
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos. 
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero. 
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos, 
mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa, 
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.

miércoles, 17 de agosto de 2011

La Casada Infiel



Y que yo me la llevé al río 
creyendo que era mozuela, 
pero tenía marido.
Fue la noche de Santiago 
y casi por compromiso. 
Se apagaron los faroles 
y se encendieron los grillos. 
En las últimas esquinas 
toqué sus pechos dormidos, 
y se me abrieron de pronto 
como ramos de jacintos. 
El almidón de su enagua 
me sonaba en el oído, 
como una pieza de seda 
rasgada por diez cuchillos. 
Sin luz de plata en sus copas 
los árboles han crecido, 
y un horizonte de perros 
ladra muy lejos del río.
*
Pasadas las zarzamoras, 
los juncos y los espinos, 
bajo su mata de pelo 
hice un hoyo sobre el limo. 
Yo me quité la corbata. 
Ella se quitó el vestido. 
Yo el cinturón con revólver. 
Ella sus cuatro corpiños. 
Ni nardos ni caracolas 
tienen el cutis tan fino, 
ni los cristales con luna 
relumbran con ese brillo. 
Sus muslos se me escapaban 
como peces sorprendidos, 
la mitad llenos de lumbre, 
la mitad llenos de frío. 
Aquella noche corrí 
el mejor de los caminos, 
montado en potra de nácar 
sin bridas y sin estribos. 
No quiero decir, por hombre, 
las cosas que ella me dijo. 
La luz del entendimiento 
me hace ser muy comedido. 
Sucia de besos y arena 
yo me la llevé del río. 
Con el aire se batían 
las espadas de los lirios.
Me porté como quien soy. 
Como un gitano legítimo. 
Le regalé un costurero 
grande de raso pajizo, 
y no quise enamorarme 
porque teniendo marido 
me dijo que era mozuela 
cuando la llevaba al río.

Federico García Lorca

martes, 2 de agosto de 2011

Solo Un Instante


Cuando obscurezca, te esperare, quiero volverte loco esta noche, con la luna llena, te esperare, hoy morirás entre mis brazos nunca soñaste con algo igual.

En tu jardín de sueños de amor, me entregue por vez primera, fuego de amor, volcán de pasión; ardió mi primavera.

Yo te siento así muy cerca de mí, aunque solo duró un instante; Sueños de pasión tras de una ilusión que tan solo duró un instante. Solo un Instante.

Todo tu cuerpo temblará, pero esta vez, es realidad, aunque el tiempo pasa, nunca, nunca olvidaras, será, solo una vez en tu vida.

Solo por ti vibre de emoción y te di mi alma entera, lluvia de amor, baño mi temblor…. Creí morir

Yo te siento así muy cerca de mí, aunque solo duró un instante; sueños de pasión tras de una ilusión que tan solo duró un instante. Solo un Instante, Solo un instante, Solo un instante, Solo un instante….

Te entregue mi amor, todo a tu control y te fuiste sin decir palabra, hoy en mi temor busco la razón aunque solo nos duró un instante, yo te siento así muy cerca de mí, aunque solo duro un instante.

Yo te siento así muy cerca de mí, aunque solo duró un instante; Sueños de pasión tras de una ilusión que tan solo duró un instante.

Gemini